Proctitis

La proctitis es una afección que se caracteriza por la inflamación del recto, la parte final del intestino grueso. Aunque puede parecer un problema aislado, esta condición puede tener repercusiones en otros órganos como la vejiga, la próstata o incluso afectar la piel o entre el intestino, dependiendo de la causa subyacente.

¿Qué causa la proctitis?

Existen diversas razones por las que una persona puede desarrollar proctitis. Entre las más comunes se encuentran:

1. Proctitis por radiación

Las personas que reciben radioterapia dirigida al recto, por ejemplo para tratar cánceres cercanos, pueden desarrollar esta condición como efecto secundario. Esta radiación puede aparecer semanas o incluso meses después del tratamiento, y sus síntomas pueden durar incluso algunos meses.

2. Infecciones de transmisión sexual (ITS)

La proctitis también puede ser causada por infecciones de transmisión sexual. Es frecuente en personas que practican coito anal, especialmente si no se utiliza protección. Algunas ITS relacionadas con esta afección incluyen gonorrea, el herpes genital y otras enfermedades de transmisión sexual. En estos casos, se habla de proctitis por gonorrea, una forma bastante dolorosa y con potencial de complicaciones si no se trata a tiempo.

3. Enfermedades inflamatorias intestinales

La enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa son tipos de enfermedad inflamatoria intestinal que pueden provocar proctitis como parte de su cuadro clínico. En estos casos, la inflamación del recto o las zonas cercanas suele ir acompañada de otros síntomas digestivos intensos.

4. Infecciones bacterianas

Ciertas bacterias, como el Clostridium difficile, también pueden causar proctitis, sobre todo después de tratamientos con antibióticos que alteran la flora intestinal. Estas bacterias dañinas pueden invadir el recto y causar inflamación, dolor y sangrado.

Síntomas comunes de la proctitis

Los síntomas pueden variar dependiendo de la causa, pero algunos de los más frecuentes incluyen:

  • Dolor o molestias en el recto
  • Necesidad urgente de evacuar
  • Sangrado rectal
  • Secreción anal
  • Sensación constante de tener que defecar (tenesmo)

¿Cómo se trata la proctitis?

El tratamiento depende de la causa. Si se debe a una infección, se recurre a antibióticos o antivirales específicos. En caso de proctitis por radiación, se pueden usar antiinflamatorios locales, cambios en la dieta o incluso terapias de oxígeno hiperbárico. Cuando está relacionada con enfermedades inflamatorias como Crohn o colitis, el tratamiento puede incluir inmunosupresores o biológicos.

¿Cuándo consultar al médico?

Si presentas síntomas persistentes en el área rectal, como dolor, sangrado o secreciones, es fundamental consultar a un especialista. El diagnóstico temprano ayuda a evitar complicaciones y a mejorar tu calidad de vida.

Referencias

Tagkalidis, P. P., & Tjandra, J. J. (2001). Cronic radiation proctitis. ANZ journal of surgery71(4), 230-237.

Babb, R. R. (1996). Radiation proctitis: a review. American Journal of Gastroenterology (Springer Nature)91(7).